¿Tan intelectual es toda la propiedad que se encuentra en internet?
Fin de partida
Cuando las familias vivían literalmente en los centros comerciales, llevando de acá para allá sus carritos repletos, como pobres de esquina, y las adolescentes, sepultadas bajo las montañas de los tops y capris que llevaban en los brazos, esperaban su turno de caja con la alegría de las novicias, y a la hora del cierre era evidente el saldo de la batalla en las ojeras de las dependientas y las prendas pisoteadas del suelo, yo sólo miraba.
Ahora paseo despacio bajo el frío de los fluorescentes o voy tocando una por una las mangas flácidas que cuelgan limpiamente de los burros.
Acabo de llegar a la fiesta y ya se han ido todos.