Está claro que la persona que pasaba mañanas enteras en la cafetería de la universidad compartiendo trucos para no planchar y la que no sale de casa con una simple camiseta sin pasar por chapa y pintura no son la misma.
Elena García de Paredes
Está claro que la persona que pasaba mañanas enteras en la cafetería de la universidad compartiendo trucos para no planchar y la que no sale de casa con una simple camiseta sin pasar por chapa y pintura no son la misma.